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“Cualquier vino es merecedor de elogio; es a la vez merecedor de ser almacenado durante unos meses, o tal vez durante años, según las propiedades concretas del vino en particular”
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Hugh Jonson
Los factores importantes para almacenar bien el vino ayudan a la conservación del mismo dentro de la botella.
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Temperatura
Los cambios bruscos de temperatura tienen mayor influencia en la evolución del vino que la temperatura ambiental. La estabilidad en la temperatura de los vinos tiene por objeto conservarlos frescos. Busque los lugares més frescos, neutralice las fuentes de calor, tape las entradas de aire frío. La clave es tener una temperatura constante alrededor de los 12 ˚ C (nunca debe bajar de 8 ˚ C ni subir a més de 18 ˚ C).
Luz
Al vino le afectan los rayos ultravioletas ya que cambian el color, el aroma y la calidad del mismo. Procure que la cava sea lo suficiente oscura e ilumínela con electricidad tenue que usted mismo pueda controlar.
Una cava debe tener circulación de aire de manera natural para que el aire exterior entre y circule aunque deben de poder abrirse y cerrarse si hace mucho calor o mucho frío.
Limpieza
Es muy importante que la cava esté limpia y desinfectada antes de guardar los vinos en ella. Esto evitará la invasión de hongos e insectos.
Humedad
La humedad de una cava debe estar entre 75% y 85% ya que el ambiente seco hace que los corchos pierdan humedad; y si hay más humedad se puede producir moho en el exterior del corcho. Lo importante es que el vino no se filtre por el tapón de la botella.
Ventilación
Una cava debe tener circulación de aire de manera natural para que el aire exterior entre y circule aunque deben de poder abrirse y cerrarse si hace mucho calor o mucho frío.
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